¿Te has quedado horrorizado al ver la última factura de la luz?, ¿estas harto de escuchar los tacones de tu vecina de arriba?, ¿tus ventanas se llenan de agua y tus paredes de humedades?, ¿te gustaría realizar una reforma en tu casa pero te da miedo que sea caro, largo y engorroso? Si has contestado afirmativamente a alguna de estas preguntas te interesa seguir leyendo.
1.- Porque el aislamiento es sinónimo de ahorro
El aislamiento es la forma más efectiva y duradera para lograr un ahorro significativo en calefacción sin dejar de estar calentito en invierno (o fresco en verano). Aislar puede significar de 100 a 500 euros menos al año en la factura de la calefacción, así que si te pones a sumar, comprobarás que la inversión queda amortizada en muy poco tiempo (entre dos y cuatro años). A lo largo de la vida útil de los edificios se estima que se recuperarán 7 euros por cada uno invertido en aislamiento, y es que cada grado de calefacción que bajemos en nuestros hogares supondrá un ahorro del 9% en nuestra factura. En URSA hay todo tipo de gamas y soluciones de aislamiento (tanto lanas minerales, como poliestireno extruido que son ideales para instalar en nuestros hogares y comenzar a ahorrar dinero.
2.- El aislamiento, la mejor fórmula para acabar con los ruidos
En España alrededor del 30% de los ciudadanos sufren los ruidos procedentes del exterior de sus hogares (tráfico, bares, tiendas, obras), pero también de los que se generan en el interior del edificio, ya sea por la actividad molesta de sus ocupantes (golpes, gritos, música, pisadas) o por el propio equipamiento del edificio (ascensores, cierres ruidosos, puertas, etc.).
La solución ideal es que todas y cada uno de las viviendas de un edificio estuviesen aisladas, así como su envolvente para protegernos del ruido. En cualquier caso, con el aislamiento de nuestra vivienda, conseguiremos una reducción muy importante del ruido, lo que nos aportará mayor calidad de vida y confort. Dependiendo de la solución constructiva que apliquemos y de los puentes acústicos que se generen disminuirán más o menos los ruidos. Por ejemplo, un trasdosado de lana mineral URSA de 45 mm y placa de yeso laminado de 15 mm puede rondar un descenso de unos 15 dB.
3.- Una forma ideal para combatir las humedades y proporcionar confort
Muchas viviendas sufren problemas de condensaciones provocados por un mal aislamiento del edificio, algo muy habitual en edificios construidos hace más de 40 años. Si no hay aislamiento entre la pared exterior e interior del edificio, cuando bajan las temperaturas se crea una diferencia de temperatura que provoca que la humedad del ambiente, la que generamos al respirar, cocinar, etc., se condense en forma de agua en la pared. La instalación de un material aislante URSA ya sea por el interior, como por el exterior, acabará con este molesto problema y dará un mayor confort a nuestra vivienda, manteniendo con mayor facilidad una temperatura estable.
4.-El aislamiento no supone una gran pérdida de espacio en nuestras viviendas
Los sistemas de aislamiento térmico por el exterior son muy ventajosos para rehabilitación, ya que consiguen incorporar el aislamiento sin necesidad de quitar espacio en el interior del edificio. Pero si no se puede realizar la rehabilitación por el exterior, existen otros sistemas de aislamiento por el interior. El espacio “robado” a la habitación es prácticamente imperceptible. Por ejemplo, colocando un aislante de 4,5 cm y una placa de yeso de 1,5 cm (6 cm) en una pared de unos 2m, el espacio que se perdería sería el equivalente a una mesita de teléfono (35x35cm).
5.- Porque la energía más limpia es la que no se consume
Los productos de aislamiento no sólo contribuyen al bienestar del usuario final, sino también ayudan al medio ambiente. Gracias al aislamiento de nuestros hogares se pueden reducir las emisiones contaminantes de un edificio en más de un 40%. Productos aislantes como los de URSA se fabrican con un gran porcentaje de vidrio reciclado y a lo largo de su vida útil como material aislante, son capaces de ahorrar más de 500 veces la energía empleada en su fabricación, transporte e instalación.
Son razones más que suficientes, ¿no? ¿Y tú?, ¿a qué esperas para aislar tu vivienda?
Ursa Ibérica Aislantes SA
Empresa Miembro de la Fundación Privada Empresa y Clima.
